El Gobierno arranca el año hundido y PP-Vox con un récord de diputados

Los partidos que sostienen el Gobierno arrancan el año hundidos en intención de voto. Si hoy se celebraran unas nuevas elecciones generales, el PSOE y Sumar obtendrían en conjunto un total de 123 escaños, 29 menos de los que lograron hace apenas un año y medio. Por contra, la unión de fuerzas de PP y Vox alcanzaría cifras récord: Alberto Núñez Feijóo se impondría con rotundidad en las urnas y podría tejer una mayoría parlamentaria de 191 diputados con el grupo de Santiago Abascal.

Éste es el escenario político para el inicio de 2025 que dibuja la última entrega de la encuesta elaborada por Sigma Dos para EL MUNDO, que también confirma que Podemos obtendría representación en solitario tras su ruptura con la formación de Yolanda Díaz aunque insuficiente para poder aspirar a reeditar una coalición de izquierdas. Además, las formaciones independentistas crecerían, las nacionalistas también subirían o como mínimo se mantendrían y el Se Acabó la Fiesta (SALF) del agitador Alvise Pérez se estrenaría en el hemiciclo de la carrera de San Jerónimo con un asiento, a pesar de la investigación abierta contra él por la supuesta financiación ilegal de su campaña a las europeas.

El sondeo -realizado entre el 13 y el 26 de diciembre con una muestra de 2.485 entrevistas- confirma la lenta pero constante tendencia a la baja de los socialistas desde el verano, lastrados por los procesos judiciales en los que han sido imputados por la presunta comisión de diversos delitos la mujer del presidente del Gobierno, Begoña Gómez; el hermano, David Sánchez, y su ex mano derecha tanto en Moncloa como en la cúpula de Ferraz, José Luis Ábalos, además de la implicación casi personal en la defensa del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz. El socio mayoritario del Ejecutivo obtendría ahora 113 escaños, ocho menos que en 2023, y un 27,1% de los votos, lo que implicaría un retroceso de cuatro puntos y medio.

Sin embargo, los partidos situados a su izquierda no son capaces de capitalizar este derrumbe. Sumar y Podemos, que en las últimas generales concurrieron en coalición, obtendrían 10 y tres diputados, respectivamente, frente a los 31 que sacaron con una única papeleta. Pese al hundimiento de su representatividad, el partido de la vicepresidenta segunda obtendría el 6,4% de los sufragios y los morados el 4,7%, apenas un punto menos del 12,3% que lograron en 2023 uniendo sus fuerzas, lo que evidencia la penalización que sufren en escaños presentándose por separado.

Por su parte, el PP se impondría de nuevo en los comicios, esta vez con mayor contundencia, 152 escaños, 15 más de los que sienta ahora en el Congreso, y pasaría del 33,1% al 34,4% del total de sufragios. Para completar los 24 parlamentarios que le faltarían a Feijóo para alcanzar la mayoría absoluta de 176 que le diera la Presidencia, sería suficiente con que alcanzara un acuerdo con Vox, que mantiene intacto su porcentaje de voto (12,4%), pero que por el reparto de asientos por provincias aumentaría su nómina actual de 33 representantes hasta los 39.

El crecimiento de los de Abascal sin que sea a costa de una caída del hoy partido líder de la oposición se produce en un contexto de desgaste del bipartidismo por la gestión de las consecuencias de la dana, tras la victoria de Donald Trump en EEUU y mientras en España continúa la polémica por el reparto de inmigrantes entre comunidades autónomas, motivo por el cual la formación situada más a la derecha del espectro ideológico rompió en julio los cinco gobiernos autonómicos que compartía con los populares. En la dirección de Génova siguen sin aproximar posturas con el Gobierno para la reforma del artículo 35 de la Ley de Extranjería que haría obligatoria la distribución de menores no acompañados, lo que les habría evitado el presumible castigo por parte de su potencial electorado, que es contrario a las políticas migratorias de integración.

68 escaños de diferencia

De hecho, el bloque del PP y Vox, con su récord de 191, se sitúa ahora a 68 escaños de distancia de PSOE-Sumar. Aun logrando volver a concitar el apoyo de todos sus socios de investidura en 2023, a Pedro Sánchez le faltarían aún otros 19 escaños para alcanzar la mayoría absoluta que le permitiría mantenerse en La Moncloa, lo que sitúa en un escenario más que improbable la posibilidad de una convocatoria de elecciones anticipadas, que en condiciones normales deberían celebrarse en 2027, incluso aunque el Ejecutivo no logre sacar adelante unos nuevos Presupuestos -de momento se han vuelto a prorrogar los de 2023-.

La encuesta de Sigma Dos, por tanto, no refleja el balance triunfalista con el que el presidente cerró este primer año de legislatura. Mientras los votantes castigarían en las urnas a los partidos de la coalición, quienes les prestan respaldo parlamentario a cambio de concesiones consiguen rentabilizar su labor.

Independentistas y nacionalistas

En su pugna por liderar el independentismo en Cataluña, tanto ERC como Junts lograrían sumar cada uno un diputado más a sus actuales grupos de siete. Tras cerrar sus procesos de reestructuración interna, los de Oriol Junqueras mantienen por la mínima la superioridad en este espectro político, conservando el 1,9% de los votos, frente al 1,8% que lograrían los de Carles Puigdemont, dos décimas más, tras haber exigido al presidente del Gobierno que se someta a una cuestión de confianza en el Congreso con el argumento de que "no es de fiar".

Asimismo, tras el relevo del lehendakari Iñigo Urkullu por Imanol Pradales, también del PNV, el partido hegemónico en el País Vasco lograría un diputado más, hasta los seis, equiparando así la marca de EH Bildu. Aun así, la formación abertzale mantiene por la mínima su ventaja en la escena política nacional, con una décima más de intención de voto que los jeltzales, que, sin embargo, no se tradujo en un sorpasso en las elecciones autonómicas del pasado mes de abril.

Por su parte, el Bloque Nacionalista Galego (BNG) subiría hasta dos diputados y Coalición Canaria (CC) y Unión del Pueblo Navarro (UPN) mantendrían un representante cada uno. Aparte del retorno de Podemos con marca propia -sus cuatro diputados actuales están diluidos ahora en el Grupo Mixto tras la consumación de la ruptura con Sumar-, la única novedad sería la irrupción de Alvise, a quien todas las encuestas de Sigma Dos realizadas desde su debut en el Parlamento Europeo con tres escaños le han dado representación también en el Congreso.